La Jubta de Eid al-Fitr, junto con el rezo, un evento que marca el fin del sagrado mes de Ramadán, comenzó con una profunda reflexión sobre la brevedad de la vida y el valor de cada momento vivido con propósito.
También se hizo hincapié en la importancia de la continuidad en la adoración a lo largo de toda la vida, no sólo durante el Ramadán.
Otro tema central fue la obligación del Zakat al-Fitr, una contribución esencial para ayudar a los menos afortunados, reforzando el compromiso de la comunidad con la purificación espiritual y la solidaridad social.
Eid al-Fitr fue descrito como un tiempo de unidad y generosidad, destacando valores como la tolerancia, el perdón y la generosidad, fundamentales para fortalecer los lazos comunitarios.
La Jubta también abordó la igualdad y la responsabilidad compartida entre hombres y mujeres en el Islam, instando a una cooperación mutua para construir una sociedad justa y próspera.
La importancia de aprovechar sabiamente el tiempo y de cumplir con las responsabilidades fue otro punto destacado, junto con un recordatorio sobre la educación de los hijos en valores como la responsabilidad y el respeto, y la importancia de ser buenos ejemplos para las futuras generaciones.
La comunidad musulmana de Ceuta reafirma su compromiso con los principios de su fe, promoviendo un mensaje de amor, paz y hermandad.
