Caridad Navarro, primera jueza de línea de Ceuta en un torneo profesional de tenis
La ceutí Caridad Navarro fue designada por el Comité de Árbitros de Tenis para actuar como jueza de línea en el equipo arbitral del torneo internacional masculino y profesional tercer ATP Challenger de Murcia, celebrado del 4 al 10 de abril. Un hecho histórico para la Territorial ceutí, ya que era la primera vez que Ceuta contaba con una jueza de línea en un torneo de categoría profesional de la ATP.
La Federación de Tenis de Ceuta ha mostrado su “gran orgullo por una recompensa por el trabajo realizado año tras año en la formación de árbitros y técnicos, facilitando la formación y promoción de todos los interesados, con la reciente creación por primera vez en la territorial del Comité de Árbitros de Ceuta con su responsable, la jueza árbitro nacional Noelia Sánchez García, y del Comité de Técnicos de Ceuta con su responsable, la entrenadora nacional Carmen Ugarte Parrado.
Caridad Navarro Sánchez es jueza de silla y línea de la Federación de Tenis de Ceuta. Formada y titulada tras el curso realizado en enero de 2019 por la Territorial ceutí, a través del Comité Español de Árbitros de Tenis (CEAT) y el Área de Docencia e investigación de la Real Federación Española de Tenis (RFET). Este curso contó con la participación de 15 alumnos, de los cuales 11 consiguieron la titulación oficial de juez de silla y línea de nivel nacional.
Caridad Navarro ha manifestado tras su estreno en el III ATP Challenger de Murcia que ha sido “una semana de mucha emoción al poder estar allí tan cerca de los jugadores profesionales. He comprobado la responsabilidad que tiene un juez de línea y la concentración, tranquilidad y seguridad que se necesita para este cometido”.
“Personalmente ha sido una experiencia inolvidable. He conocido a compañeros que me han ayudado en mi debut y me han enseñado las técnicas que requieren las diferentes líneas. Me he sentido muy acogida por todo el equipo”, ha añadido.
Con respecto a los partidos, “el modo de trabajo ha sido mediante rotaciones de una hora, excepto en la final que era de 45 minutos. Esto nos ha permitido arbitrar todos los partidos, de individuales y dobles”.
“Ha sido un honor poder arbitrar en la final con la responsabilidad que eso supone, aunque también he disfrutado de la experiencia de poder vivir un torneo desde dentro”, ha concluido.
La FTC ha dado la enhorabuena a Caridad Navarro por su gran logro. “Esperamos que siga disfrutando del arbitraje en el mundo del tenis y que sirva de ejemplo para el resto de árbitros de tenis titulados en nuestra ciudad”, apuntan desde la Territorial.