Al cuarto de hora de detectarse el vertido del K ONSET, estaban movilizados los medios que contempla el Plan Interior Marítimo (PIM), con el que la Autoridad Portuaria respondió a la situación de alerta de manera inminente, y solo dos horas después, la situación se dio por controlada.
Una vez se cortó la fuga, las labores se han centrado en el confinamiento del vertido en una zona específica del puerto, de donde no ha salido, y en su retirada, en lo que se sigue trabajando. Por el momento, se desconoce la cantidad de combustible que ha llegado a la lámina de agua. La Autoridad Portuaria informa de que los técnicos trabajan “para estimar las cantidades “reales vertidas de fuel ligero”.
Por el momento, se ha procedido al cambio de atraque del buque para su reparación.
Es el tercero que protagoniza en lo que va de año un vertido en el puerto de Ceuta. Las fuentes consultadas auguran que habrá de hacer frente a una sanción superior a las dos con que se remataron aquellos otros sucesos, cuando la sanción superó los cien mil euros.