La quinta ola de la pandemia cada vez está más descontrolada en la ciudad. La entrada en juego el pasado julio de la variante Delta, más contagiosa, más letal y con una disminución del efecto de la vacuna, nos deja un constante incremento de los contagios en nuestra ciudad. Sin embargo, el notificada hoy por las autoridades sanitarias es de los más preocupantes que hemos vivido desde el pasado mayo, al notificarse 35 nuevos positivos. De los cuáles, 12 pertenecen a un brote detectado entre los migrantes alojados en las naves del Tarajal.
Si bien, 17 de ellos tienen menos de 30 años, ya no podemos hablar de una ola que afecta a los jóvenes, pues el resto de notificados se distribuyen entre todas las franjas de edad, siendo tres de ellos mayores de 70 años.
En cuanto a la presión hospitalaria, se registra un curado, por lo que el total de ingresados es de diez. De ellos, tres se encuentran en la UCI, cuatro en urgencias, y tres en planta.
Con este panorama, Ceuta registra una incidencia de 159,14 por cien mil habitantes, por lo que continuamos en riesgo muy grave y ya casi rozando el extremo. Mientras que el porcentaje de hospitalizados en UCI es de 17.65%, es decir, riesgo alto.