El Sindicato Médico se muestra indignado por la respuesta del Gobierno a la crítica situación sanitaria de Ceuta
El Sindicato Médico de Ceuta (SMC) manifiesta su profunda indignación ante la reciente respuesta del Gobierno sobre la situación sanitaria en Ceuta y Melilla y señala que "lejos de ofrecer soluciones reales, las afirmaciones del Ejecutivo demuestran una ignorancia alarmante y un desprecio absoluto hacia los profesionales médicos y la ciudadanía. Esta postura solo evidencia una desconexión preocupante con la realidad que se vive en los centros de salud y hospitales de Ceuta".
El SMC quiere destacar que las declaraciones que afirman que "no faltan profesionales en Ceuta" están "completamente alejadas de la verdad". El sindicato denuncia una escasez crónica de médicos en diversas especialidades como Endocrinología, Dermatología, Radiología, Urología, Oftalmología, Oncología o Urgencias y Atención Primaria, entre otras. Una falta de personal que "afecta gravemente la calidad asistencial, derivando en largas listas de espera y numerosas evacuaciones de pacientes a otras localidades".
Desde el SMC afirman que los médicos de Ceuta están agotados de ser tratados como si su principal motivación fuera económica. "Nuestro verdadero interés es contar con más profesionales cualificados para garantizar una atención digna a nuestros pacientes, así como poder reducir el número de guardias y sobrecargas que ponen en riesgo tanto nuestra salud como la de quienes atendemos", añaden. Actualmente, los médicos de atención primaria en Ceuta deben atender hasta 70 pacientes al día, doblando consultas y trabajando en condiciones "insostenibles".
Para el sindicato es indignante que el Gobierno aún dude, después de dos años de haberse publicado en el BOE, si Ceuta es o no una zona de difícil cobertura médica.
Por último, el SMC insta a las autoridades a que escuchen a los profesionales y usuarios que sufren las consecuencias de la mala gestión sanitaria en Ceuta. "Es fundamental que el Gobierno y el Ingesa dejen de basar sus afirmaciones en estadísticas manipuladas y afronten la realidad de una vez por todas. La salud de los ceutíes está en juego, y no se puede seguir ignorando la gravedad de la situación".