SINDICATOS

CCOO y UGT apoyan al 112 ante las acusaciones de "mala praxis" de la asociación Daubma

- Ambos sindicatos apoyan a la plantilla destinada al 112 “sin fisuras” y solicitan a la Consejería de Gobernación que haga todas las gestiones necesarias para comprobar si lo que Daubma expresa públicamente es cierto y depure responsabilidades

CCOO y UGT, sindicatos con representación en Amgevicesa, quieren expresar públicamente su apoyo a los trabajadores del Teléfono Único de Emergencias 112 que, en los últimos días, han sido acusados de “mala praxis” por la asociación animalista Daubma.

Ambos sindicatos apoyan a la plantilla destinada al 112 “sin fisuras” y solicitan a la Consejería de Gobernación, consejería donde está adscrito el servicio, que haga todas las gestiones necesarias para comprobar si lo que Daubma expresa públicamente es cierto y depure responsabilidades; ya que fuentes del Centro de Emergencias 112 han señalado a distintos medios que no hubo comunicación con ellos el día que denuncian los animalistas para gestionar las precarias condiciones físicas del animal que Daubma señalaba en su nota pública.

“Ante las graves manifestaciones realizadas a los medios de comunicación por la asociación Daubma y atendiendo la afirmación realizada desde el Centro de Emergencias 112 de que no existen llamadas el día en cuestión en relación al can, la Ciudad no puede seguir mirando a otro lado y/o dejar pasar los días sin posicionarse públicamente y dar una explicación oficial para esclarecer lo que, presuntamente, sucedió con el animal en cuestión. Está en entredicho un servicio esencial que no puede quedar como deficiente sin consecuencias. Solicitamos, tal y como pide Daubma, que la Consejería depure responsabilidades y en el caso de que no tenga fundamento la denuncia también lo haga contra aquellos que, presuntamente, han creado una alarma social al acusar al 112 de “deficiente” por no actuar como debía”, argumentan ambos sindicatos.

CCOO y UGT esperan que su petición sea atendida y se esclarezca lo sucedido el 31 de diciembre cuando, según Daubma, un operador del 112 no atendió correctamente las llamadas de un vecino del Príncipe solicitando la actuación de los organismos correspondientes para atender a un perro de raza pastor belga “malinois” que presentaba un estado de inanición evidente y que el día 9 de enero falleció en dependencias de la Protectora.