La Guardia Civil comisionó entre marzo y septiembre a Ceuta un total de 352 efectivos de su unidad de élite, la Agrupación de Reserva y Seguridad, para apoyar a los 600 agentes de la Comandancia local en las tareas de “vigilancia e impermeabilización” de la frontera de la ciudad.
Según la información facilitada por el Ministerio del Interior a los parlamentarios nacionales por Ceuta y Melilla, dicho despliegue se extendió hasta la convocatoria de entrada masiva a nado de mediados de septiembre, cuando la Benemérita también derivó a la ciudad refuerzos marítimos y aéreos.
El Gobierno central ha recordado que los apoyos se determinan “a partir del análisis de riesgo y criterios operativos orientados a determinar en cada momento las necesidades de medios humanos y materiales necesarios para desarrollar con éxito las misiones encomendadas”.
Además, Interior ha subrayado que el personal que presta servicio en los perímetros fronterizos ha sido dotado con material “óptimo” de reciente adquisición para mejorar la capacidad operativa y su seguridad en el desempeño de sus funciones.