De momento, el colectivo vecinal acude a la reunión en la Consejería de Fomento sin una postura cerrada hasta conocer todos los detalles que se pongan sobre la mesa. Durante estos días, el secretario y tesorero de la Federación de Vecinos, Manuel Díaz, ha estudiado junto con el abogado y la asesoría laboral todos los detalles del convenio. La firma de dicho acuerdo supondría 3,6 millones de euros en gasto de personal ya que el documento estatal contempla mejoras salariales y más estabilidad para los trabajadores. Sin embargo, los presupuestos de la Ciudad para el próximo año contemplan una partida de 3 millones para la gestión de Brigadas Verdes, de ahí que la Federación Provincial considere inviable esta firma del convenio ya que no le salen las cuentas.
Como ya informó RTVCE, tanto CC.OO como el comité de empresa de Brigadas Verdes son favorables a la integración en el convenio estatal. Desde la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos dejan claro que su objetivo es la estabilidad y mejora de los trabajadores, así como una futura municipalización pero no pueden firmar lo que sería una sentencia de muerte para las cuentas de la asociación vecinal, tal y como reconoce su tesorero. Igualmente insisten en que se trata de una responsabilidad de la Ciudad.
La adhesión al Convenio Estatal de Jardinería conlleva una modificación en la mayor parte de las categorías laborales de los 119 trabajadores de Brigadas Verdes. De esta forma, un peón pasaría a ser peón jardinero, los conductores serían oficiales conductores, los capataces tendrían la denominación de encargados, mientras que los cinco coordinadores de brigada figurarían laboralmente como técnicos no titulados. Por tanto, la rúbrica e incorporación al acuerdo estatal de jardinería queda pendiente de lo que suceda este lunes entre las partes citadas en la Consejería de Fomento.