La renovación del Voto de Gracias es una tradición iniciada por el conde Torres Vedrás en 1651. Ante la imagen de la patrona de Ceuta, Juan Vivas ha procedido a manifestar su compromiso de "conducirnos por la senda de la integridad y la decencia; de poner el interés general por encima de cualquier otro; de servir al bien común, de procurar la justicia, la prosperidad y el bienestar de los ceutíes, de todos los ceutíes; de centrar nuestra atención en los más débiles y necesitados, en los más vulnerables".
Al mismo tiempo, ha pedido protección y amparo para el pueblo ceutí. Todo ello antes de proceder a la renovación en sí del Voto de Gracias: "Quiero también ratificar y así lo ratifico, como se hizo en siglos pasados, la obligación que contrajimos entonces de celebrar públicamente cada 9 de febrero este Voto de Gracias que nos recuerda la protección que ha dispensado, dispensa y dispensará a Ceuta y a sus habitantes. Todo ello, sin perjuicio de la festividad que, desde 1575, viene celebrándose cada 5 de agosto".
Antes de finalizar, los asistentes han cantado el himno dedicado a la patrona y Alcaldesa Perpetua de Ceuta, Santa María de África. El acto ha concluido con la ofrenda floral y la posterior foto de familia.
