5 de mayo de 2020, 14:38
La asociación Digmun ha recordado hoy que muchas mujeres que trabajaban en el servicio doméstico en Ceuta, han sido despedidas. Algunas de ellas tenían contrato de trabajo y se encontraban en una situación “privilegiada”, otras no estaban aseguradas, y otras, sólo trabajaban un día o dos por semana y cobraban por día trabajado. El cierre de la frontera ha agravado aún más la situación de aquellas que se encuentran en Marruecos, bien porque no se les puede hacer llegar el sueldo que les corresponde por el trabajo ya realizado, o bien, según Digmun, porque ni siquiera hay intención de hacerlo. Por último esta asociación considera que es una gran injusticia social para este colectivo no tener derechos laborales que las asistan y depender exclusivamente de la buena voluntad de la persona que contrata para que puedan cobrar el sueldo que les pertenece.
