Un año más, un 25 de noviembre, desde el Partido Popular de Ceuta, denuncian y condenan rotundamente cualquier forma de violencia contra la mujer, violencia, que por desgracia, sigue produciendo un número de víctimas que ninguna sociedad democrática y avanzada puede y debe tolerar.
La violencia contra la mujer supone un delito execrable y además la máxima expresión de la desigualdad entre hombres y mujeres.
En lo que llevamos de año, 37 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o ex parejas dejando huérfanos a 24 menores, menores que también son víctimas de esta lacra social. En algunos casos no constaba denuncia previa contra el agresor, lo cual dificulta mucho su protección.
Desde el Partido Popular de Ceuta abogan por la unidad de todas las fuerzas políticas en la lucha contra la violencia de género. La realidad de estas víctimas no puede ser ignorada y debemos comprometernos todos para su erradicación. Creemos que esta lucha nos une a todos con independencia de nuestro sexo, edad, condición u orientación política.
En este día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, los populares reivindican la importancia del Pacto de Estado contra la Violencia de Género aprobado en 2017 por una amplia mayoría en el Congreso, gracias a la capacidad de negociación y sentido de Estado de un gobierno del Partido Popular y que cuenta con un compromiso económico de mil millones de euros en cinco años. Su aprobación supuso un enorme avance en la atención institucional a este problema y es necesario dar continuidad a las medidas contempladas en el mismo.
Son muchos los retos por superar todavía en esta lucha y, por desgracia, la actual crisis sanitaria en la que estamos inmersos añade dificultades en muchos de los casos.
Es necesario una actitud positiva, transmitir a todas las mujeres que han sido o están siendo víctimas un mensaje de fortaleza y aliento. Acabar con la violencia de género es posible.
Desde el Partido Popular de Ceuta, un año más, reiteran su compromiso para construir una sociedad libre, igualitaria y que defienda los derechos fundamentales de todos sus integrantes, una sociedad donde se cumpla el mandato constitucional de la igualdad entre hombres y mujeres.