El Sindicato Médico de Ceuta (SMC) ha denunciado este martes la situación "límite" que a su juicio atraviesa el servicio de radiodiagnóstico del Hospital Universitario de Ceuta (HUCE). "A pesar de los anuncios sobre inversiones en tecnología y obras, lo cierto es que la falta de especialistas amenaza con colapsar un servicio esencial para la atención sanitaria de la ciudad", ha alertado.
"Mientras se promocionan avances en infraestructuras, no se adoptan medidas efectivas para reforzar el personal médico", ha lamentado en un comunicado en el que ha recordado que "la aprobación del Real Decreto 118/2023, que define los puestos del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) como de difícil cobertura, habilitaba precisamente a aplicar incentivos para atraer facultativos, pero no se ha desarrollado ninguna actuación en esa línea".
Según el SMC "en el caso concreto de radiología, la situación es especialmente grave". "Aunque en las memorias de Ingesa se habla de una plantilla de siete radiólogos, la realidad es que únicamente cinco figuran en activo, y de ellos solo cuatro están operativos: uno permanece de baja, y tres están prolongando su ejercicio tras haber alcanzado la edad de jubilación", ha precisado.
A esta escasez de profesionales se suma "la sobrecarga de trabajo", ya que "los radiólogos no solo deben hacerse cargo de pruebas como TAC, resonancias, radiografías o ecografías, sino también de guardias que garanticen atención ininterrumpida durante todo el año". Además, "la incorporación de una resonancia magnética de última generación (3 Teslas) ha llegado sin refuerzo alguno de personal ni formación específica para su manejo, lo que ha generado aún más presión sobre un equipo ya al límite".
El sindicato denuncia que no se haya actuado con previsión para cubrir la vacante del especialista jubilado hace más de un año ni para formar al personal antes de la puesta en marcha de nuevos equipos. Lejos de adoptar soluciones estructurales, desde Ingesa se ha optado por derivar la interpretación de estudios a empresas privadas externas, lo que supone una privatización encubierta del servicio y una pérdida de control sobre la atención prestada. Este modelo también se está extendiendo a pruebas como los TAC y las ecografías, afectando a la cohesión y eficiencia del servicio.
Otro foco de preocupación es "la negativa reiterada a conceder la exención de guardias por edad a algunos facultativos, lo que está provocando un desgaste continuo y anticipa un problema serio de cobertura para los próximos meses".
Por todo ello, el SMC ha hecho "un llamamiento urgente" a la ministra de Sanidad para que tome cartas en el asunto y obligue al Ingesa a aplicar medidas reales y eficaces que permitan captar y mantener especialistas en la ciudad. "De no actuar a tiempo, existe un riesgo real de que el servicio de radiodiagnóstico colapse, algo especialmente preocupante a las puertas del periodo vacacional", ha advertido antes de reiterar su disposición a "colaborar en la búsqueda de soluciones".
